SERVICIOS
QUIROPODOLOGÍA
Las cosas importantes son aquéllas que nos pasan en nuestro día a día.
Siempre decimos que no sabemos lo que tenemos hasta que lo perdemos… ¡pues es cierto!
Nuestro servicio de quiropodología consiste precisamente en eso: solucionar las pequeñas (y a veces no tan pequeñas) dolencias que afectan a tus pies y que hacen que tu actividad diaria se vea limitada, reducida o anulada.
EXPLORACIONES BIOMECÁNICAS
Ahora está muy de moda eso de los estudios de la pisada. Pero, concretamente, ¿en qué consiste? ¿y para qué sirve?
¿Alguna vez te ha pasado que has empezado muy motivado a practicar algún tipo de deporte y al poco tiempo has tenido que dejarlo porque te has lesionado o porque te es imposible seguir el ritmo de esa actividad, ya sea de forma profesional, amateur o de ir por casa?
¿Alguna vez te has preguntado por qué cada cierto tiempo te vuelves a “enganchar” y no sales de la consulta del fisio?
¿Tu hijo tropieza mucho? ¿se cansa cuando practica deporte? ¿o directamente no le gusta hacer ninguna actividad que implique correr o moverse mucho? ¿deforma el calzado muy rápidamente?
¿Tienes en tu armario una zapatería “full equip” y no hay manera de que puedas calzarte sin que te duela algo?
Pues si algo de esto te ha ocurrido alguna vez puede que la causa sea alguna alteración a nivel muscular, articular o tendinosa relacionada con la biomecánica, es decir, con la forma en la que tu cuerpo se mueve.
PLANTILLAS PERSONALIZADAS Y A MEDIDA
¿Cuántas veces has visto en televisión anuncios de plantillas para pies doloridos, cansados, para hacer deporte, para aguantar las horas de trabajo o para poder soportar los tacones?
¿Te ha ocurrido alguna vez, o cuánta gente conoces, a la que le han hecho unas plantillas en una farmacia, las ha comprado en una tienda de deporte o en una zapatería y no ha habido forma de poder soportarlas porque son incómodas o simplemente porque no han notado ninguna diferencia de llevarlas a no hacerlo?
Pues bien, te contamos por qué en la mayoría de los casos no funcionan.
CIRUGÍA
En algunas ocasiones hay dolencias a las que es imposible darles una solución únicamente con tratamiento conservador, y por lo tanto hay que recurrir a la cirugía.
¡A todos nos asusta esa palabra!, pero al igual que entendemos que una apendicitis no se cura aplicando una “cremita”, tenemos que entender que hay problemas en nuestros pies que tampoco pueden solucionarse de esa forma.
Una deformidad o una dolencia en el pie como puede ser un juanete, un dedo en garra, una uña incarnada o un neuroma de Morton, que nos limita o anula la posibilidad de andar, calzarnos adecuadamente, trabajar o dormir sin dolor, practicar el tipo de deporte que nos gusta, salir a pasear, cenar o charlar con nuestros amigos y familiares, finalmente, lo que está haciendo es amargarnos la vida.
La cirugía del pie no es más que otro recurso del que disponemos para dar solución definitiva a estos problemas.