PODOLOGÍA PARA PERSONAS MAYORES
Con la edad nuestros pies también envejecen, se deterioran y padecen lesiones asociadas al paso del tiempo. Pero eso no quiere decir que tengamos que dejar de hacer lo que nos gusta y nos hace sentir bien.
Salir a pasear al perro, quedar con los amigos para jugar una partida de cartas o merendar con las amigas en la cafetería puede ser algo que se haga cuesta arriba por culpa de deformidades como pueden ser los dedos en garra, juanetes, pérdida de la almohadilla grasa plantar, o de lesiones como una uña incarnada o un “ojo de pollo”.
Enfermedades como la diabetes o la artrosis también afectan directamente a nuestros pies, y por ello en nuestra clínica tenemos planes de tratamiento específicos, mediante plantillas de descarga y de compensación de desalineaciones, ortesis de silicona, calzado adecuado y formación sobre medidas preventivas para que dichas patologías no lleguen a producir lesiones importantes como pueden ser las úlceras y las deformidades digitales.
Muchas veces la edad lo que conlleva es que disminuya nuestra agudeza visual y nuestra flexibilidad, y por ello se haga peligroso que intentemos solucionar por nosotros mismos los problemas que nos puedan surgir en los pies.
Entendemos que la vida a estas edades cambia de ritmo y por eso nuestro equipo siempre está encantado de escucharte, ayudarte y tratar de aprender de la voz de la experiencia.