Hay trabajos en los que los pies sufren mucho más que en otros. Enfermeros, camareros, mecánicos, carteros y un sinfín de profesiones requieren estar mucho tiempo de pie, de plantón o sin parar.

El calzado de seguridad, los tacones y determinadas posiciones hacen que los músculos de los pies que están soportando toda la carga del día acaben contracturados y muy cansados.

Las embarazadas, a medida que avanzan en su estado y van aumentando de peso pueden sufrir problemas como uñas incarnadas (uñeros), durezas o pies hinchados.

La piel es el órgano más grande de nuestro cuerpo y entre una de sus funciones es la de servir de barrera protectora frente a agresiones externas. Pero para ello debe estar sana, y eso implica que esté sin lesiones y bien hidratada. ¿Cuántas veces hidratas tus pies?

Para aquéllos que os sentís identificados con lo anterior o simplemente disfrutáis cuando os tocan y masajean los pies pero nunca tenéis tiempo o quién os lo haga, nuestro servicio de masaje relajante, descontracturante e hidratante, de tan sólo 15 minutos, os hará decir:

“¡Uoh¡ ¡Qué bueno!!!”